Mar, arena, brisa ... en el lugar donde se dice que se acaba el mundo ...
Disfrutando de una copa de vino, con la compañía de un gran conversador, de un hombre con una mirada directa, una voz que emborracha, un hombre que saca lo mejor de mi, que me conoce bien, que provoca mi lado más perverso ...
Un aperitivo, cargado de frases con intención, miradas que desnudan y que provocan, de manos que van a la piel...: "¿Qué vamos a comer?" - pregunté sonriendo.
Sin alteración ninguna, con su mano en mi muslo, por debajo de mi falda, se acercó a mi oído, notando su aliento, escuché: -"Yo, ... a ti.". Me ericé ... Aún tengo su mirada en mis retinas! Ay!
Caminamos hacia los acantilados, el viento soplaba fuerte, mi melena luchaba contra él, segura me dirigí hacía el faro ... detrás mi hombre, observándome como caminaba, provocándole, permitiendo que fuese espectador del coqueteo de mi falda con el viento ...
Me excitaba saber que estaba detrás, notar su deseo sin verlo, escuchar sus pasos, sentir como mi sexo palpitaba, mi piel sensitiva al viento, sentirme tocada sin sus manos ...
Entré en el faro, me apoyé en una de sus paredes, esperando la entrada de mi macho ... vi su sombra aparecer, me pegué a la pared, las palmas de mis manos abiertas, el frío de las entrañas del faro en mi espalda, la pintura desaparecida por el tiempo, por las caricias del mar y su humedad, testigo de mis ganas ... El viento alardeaba entrando por los recovecos de la antigua edificación, el mar golpeando las rocas con desesperación ...
Apareció, caminó hacía mi, con su mirada de deseo ..., noté el frío de sus manos debajo de mi vestido, acariciando mis muslos, jugueteando con la goma de las ligas de mis medias, su frente casi tocando mi frente : - "Hoy te comeré entera!". Le escuché. Mis braguitas empezaban a mojarse ....
Me besó, lamiendo mis labios, mojándolos ... aumentando mis deseo, abrí mi boca, nuestras lenguas comenzaron a saborearse ....
Sus manos, apartando mi chaquetón, sacaron la camisa por fuera de la falda, acariciando con sus dedos mi ombligo y mi vientre ... se pegó a una de mis piernas, noté su verga dura, arrogante.
Sus labios en mi cuello, besos suaves, despacio, lentos ... una de sus manos, subiendo mi falda ... la otra, entre mis piernas se movía despacio a lo largo de mi sexo, notaba que estaba mojada para él ...
Abriendo mi camisa, fue bajando, besándome suavemente, mi falda totalmente arrugada en mi cintura.
Separé un poco mis piernas, él de rodillas, fue subiendo sus manos, desde mis tobillos hasta mis muslos, notando sus dedos por mis nalgas, por el interior de mis muslos ....
Note como me besaba y me chupaba el interior de mis muslos, me estremecí ... "Abréte un poco más!
Deslizó sus dedos por el encaje de mis bragas, me acarició por encima de ellas: "Me gusta tu coño, niña" - decía, mientras bajaba un poquito mis bragas para ver mi pubis y besarlo ...
Apartó las braguitas para un lado, y sentí como se iba acercando despacio a mi coño, latía fuertemente, lo notaba hinchado ... ¡Dios Mio!! ¡Qué ganas de sentirlo entre mis piernas!
Tan caliente estaba, que mis brazos estaban en alto, mi espalda apoyada a la pared, mi cadera separada y abierta mostrándome deseosa de que me comiese entera!!!!
Pasó su lengua por todo mi coño, me estremecí y le ofrecí mi primer gemido ... Sentí que me chupaba la zona de unión de piernas con mi coño.... Ummm!!!
No podía quedarme quieta, y empecé a moverme, en ese momento sus labios estaban en todo mi sexo, besándolo , su lengua tan aplicada separó mis labios, haciéndola correr por todo mi coño. Ohhhh!!!
Me folló con su rica lengua! Mi clítoris gritaba histérico sus lamidos ... noté como me lo succionaba despacito, como me lo chupaba ...
Me movía lentamente, apretándome más a su boca ... lo necesitaba!!!
Mis piernas se estremecían, sentía el orgasmo llegar, y mi macho está deseoso de beberme!
Él notaba como me iba, así que empezó a chupar más fuerte, cada vez más fuerte, seguía el ritmo de mis movimientos ... estaba fuera de mi!!!!
-"Sigue, no pares", "Cómeme así", "Demuéstrame como me deseas" - le decía mientras notaba toda mi humedad, mi orgasmo invasor acompañado de mis gemidos ...
Tal fuerte fue, que me iba resbalando, acabando acostada en el suelo, y él entre mis piernas, pero está vez eran sus dedos lo que responsables de mi continuo placer....
Mi orgasmo decaía en intensidad, pero mi macho, me ofreció su lengua, ésta vez metiéndola en mi vagina ... hacia dentro, ... hacía fuera ... Bufff!!!!!
Me volví a correr, me abandoné, disfrutando y saboreando mi placer, la entrega de ese hombre que me deseaba, que me bebía sediento ...
Ante el mar enorme y en ese lugar alto la bebida... Es que hay aún lugares tan inexplorados...
ResponderEliminarBesos
Un viaje turistico por el faro increible. Un besazo.
ResponderEliminar