Hoy desperté con ese cosquilleo entre mis piernas ... con una contenida humedad, reservada para ti ,,, pero deseosa de disfrutar,,,
Mis manos frenadas por órdenes de mi cerebro que parecían más, esas frases hechas por ti, dichas en mi imaginación ,,,, frases pronunciadas por ti ,,, escuchadas por mi ,,, y obedecidas poco a poco,,, por cada palabra,,,cada pausa,,,,
Esta mañana excitada como un animal te deseaba ,,, para sofocar mis ganas,,,, y calmar las tuyas,,,
Esta mañana, mis manos fueran las tuyas,,, y abierta cuanto más podía,,,, disfrute de ese orgasmo,,, lento, intenso,,, pausado y controlado por momentos,,, pero que hizo que mi coño hambriento de ti, se mojase,,,, y llorase excitado tu ausencia ,,,, provocando en mi, gemidos, y pequeñas convulsiones de un placer que me gustase que escucharas y contemplaras ,,,,
Te deseo ,,,, y te sigo disfrutando...
Y no son ganas simples, sino compartidas. Tus manos en mis sueños producen un torrente de humedad, como las olas golpeando mi cuerpo tumbado en la arena....que es tu piel.
ResponderEliminarY en esa dicha, en ese momento de gozo....cuando todo estremecimiento para el tiempo y solo se vive por ese instante, tú adornas mi instante con tus manos, tus besos y tu pícara mirada de "Sí, te conseguí: conseguí llevarte al extremo que te había prometido".
Mi adorado Tito Sorron, un lujo tener, y más leer estas palabras. Eres dulzura, elegancia y hombría! Agradecerte inmensamente tu comentario,,, y enviarte con toda dulzura y cariño un millón de besos!!! Gracias cielo!
EliminarEl no escondido y arebatado deseo entre tus piernas.
ResponderEliminarExcitante y tan dulce como el néctar de tu cuerpo