Hoy, escuchando la canción de Salif Keita “Madan Exotic Disco” ... mis pezones se excitaron. Sorprendida, sonreí.
Está siendo una época de cambios, de renacer, de saber vivir con huecos emocionales … pero repito, me calma verme sonreír al escuchar esa canción y descubrirme que aún puedo sentir y desear …
Recordarte sin nostalgia, solamente en base a una calma madura te rememoro, mientras bailo descalza en bragas y con mi camiseta de tirantes de Hello Kitty …
Me balanceo apoyada en esa pared de la sala de mi nuevo piso, elevo mis brazos en esta danza imprevista … sin testigos oculares, siendo yo la única en este espacio que se llama hogar...
Mis brazos en alto como alas para sentir esta libertad de una soledad que me están gustando, muerdo mis labios, cerrando los ojos y dejándome llevar al ritmo de The Dandy Warhols … The Last High … ¿lo recuerdas? … ¿No? …
Cierra esos ojos, e imagina, sueña … recréate, tócate imaginándome …
Suéñame, imagíname …
Da igual como sea … Lo importante es que aunque estemos a distancia, no estemos distantes …
Gracias a la ensoñación, a la imaginación del deseo despierto, juntos disfrutaremos de esa esencia cargada de sensualidad, deseo, buscando una excitación que nos haga temblar y volver a ser esos animales de celo y sexo.
